La Radiofrecuencia (RF) o Radio Termia genera ondas electromagnéticas entre 0,3 MHz a 10 GHz que penetran en los tejidos expuestos y producen calor, como resultado de la absorción de energía en estos tejidos.
La Radio Termia se emplea en el tratamiento de la celulitis, en los reafirmantes y en los de antienvejecimiento.
En el tratamiento de la celulitis, esta tecnología provoca una mayor vasodilatación, efectos lipolíticos y un aumento de la eliminación de los residuos, lo que mejora la circulación local de la sangre, el drenaje del exceso de líquidos, la reducción de la celulitis y la mejora de la elasticidad de los tejidos.
En los tratamientos reafirmantes, la Radio Termia permite reequilibrar progresivamente la piel, hasta generar un tejido más compacto, reduciendo, o en algunos casos, eliminando la desagradable y antiestética piel relajada.
En los tratamientos antienvejecimiento en rostro y cuello, la Radio Termia logra una reducción de la profundidad de las arrugas, un aumento de la tersura cutánea, incremento de la hidratación y desintoxicación de la piel, mayor oxigenación del tejido y mejoría de la funcionalidad muscular.